¿Qué es la huella de carbono?
¿Qué es la huella de carbono?
El diccionario dice que la huella es la señal que deja el pie del hombre o del animal en la tierra por donde pasa. Entonces ¿cómo podemos definir lo que entendemos por huella de carbono? Si tomamos prestada la definición anterior sería algo así como la señal que dejan nuestras emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en el Planeta.
Siendo algo más precisos, la huella de carbono se define como la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto por un individuo, organización, evento o producto.
De ahí que podamos distinguir 2 acepciones del concepto:
- La huella de carbono de una organización, que mide la totalidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos por efecto directo o indirecto provenientes del desarrollo de la actividad de dicha organización.
- La huella de carbono de producto, específica para medir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) durante todo el ciclo de vida de un producto: desde la extracción de las materias primas, pasando por el procesado y fabricación y distribución, hasta la etapa de uso y final de la vida útil (depósito, reutilización o reciclado).
En esta ocasión vamos a desarrollar un poco más lo que supone el cálculo de la huella de carbono de una organización (entidad pública o privada, asociación u organización sin ánimo de lucro, por ejemplo).
Como ya vimos en su día, el análisis de huella de carbono proporciona como resultado un dato que puede ser utilizado como indicador ambiental global de la actividad que desarrolla la organización.
La huella de carbono se configura como referencia para el inicio de actuaciones que lleven a reducir el consumo de energía y a una mejor utilización de los recursos desde un punto de vista medioambiental
Por tanto, la huella de carbono nos permite identificar tanto la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que son liberadas a la atmósfera como consecuencia del desarrollo de cualquier actividad, como las fuentes de emisiones de estos GEI y establecer medidas eficaces de reducción.
Ya que estamos hablando de los gases de efecto invernadero, vamos a identificar a los principales:
- Vapor de agua (H2O): Gas inodoro e incoloro que se obtiene por evaporación o ebullición del agua líquida o por sublimación del hielo. Es el que más contribuye al efecto invernadero debido a la absorción de los rayos infrarrojos.
- Dióxido de carbono (CO2): También denominado anhídrido carbónico.
- Metano (CH4): Es el hidrocarburo alcano más sencillo. Es incoloro e inodoro y apenas soluble en agua en su fase líquida. En la naturaleza se produce como producto final de la putrefacción anaeróbica de las plantas. Es un GEI unas 23 veces más potente que el CO2.
- Óxidos de nitrógeno (NOx): Son varios compuestos químicos binarios gaseosos formados por la combinación de oxígeno y nitrógeno. El proceso de formación más habitual de estos compuestos inorgánicos es la combustión a altas temperaturas, proceso en el cual habitualmente el aire es el comburente.
- Ozono (O3): Sustancia cuya molécula está compuesta por tres átomos de oxígeno.
- Clorofluorocarbonos (CFC): Derivados de los hidrocarburos saturados obtenidos mediante la sustitución de átomos de hidrógeno por átomos de flúor y cloro principalmente. Han sido muy usados como gases refrigerantes, agentes extintores y propelentes para aerosoles.
Pero al referirnos a huella de carbono de una organización y a sus fuentes emisoras que se analizan en el cálculo, necesitamos determinar lo que denominamos como alcance de las emisiones.
Los alcances agrupan las fuentes emisoras de gases de efecto invernaderoque puede tener una organización. Se distinguen 3 alcances: 1, 2 y 3.
En primer lugar, cabe indicar que las emisiones asociadas a las operaciones de una organización se pueden clasificar como emisiones directas o indirectas:
- Emisiones directas de GEI: son emisiones de fuentes que son propiedad de o están controladas por la organización. De una manera muy simplificada, podrían entenderse como las emisiones liberadas in situ en el lugar donde se produce la actividad, por ejemplo, las emisiones debidas al sistema de calefacción si éste se basa en la quema de combustibles fósiles.
- Emisiones indirectas de GEI: son emisiones consecuencia de las actividades de la organización, pero que ocurren en fuentes que son propiedad de o están controladas por otra organización. Un ejemplo de emisión indirecta es la emisión procedente de la electricidad consumida por una organización, cuyas emisiones han sido producidas en el lugar en el que se generó dicha electricidad.
Una vez definidas cuáles son las emisiones directas e indirectas de GEI y para facilitar la detección de todas ellas, se han definido 3 alcances:
- Emisiones directas de GEI. Por ejemplo, emisiones provenientes de la combustión en calderas, hornos, vehículos, etc., que son propiedad de o están controladas por la entidad en cuestión. También incluye las emisiones fugitivas (por ejemplo, fugas de aire acondicionado, fugas de CH4 de conductos).
- Emisiones indirectas de GEI. Por ejemplo, las asociadas a la generación de electricidad adquirida y consumida por la organización.
- Otras emisiones indirectas. Algunos ejemplos de actividades de alcance 3 son la extracción y producción de materiales que adquiere la organización, los viajes de trabajo con medios externos, el transporte de materias primas, de combustibles y de productos (por ejemplo, actividades logísticas)realizados por terceros o la utilización de productos o servicios ofrecidos por otros.
Habitualmente las fuentes de GEI que se contemplan para estimar esta huella en una organización son las recogidas en los alcances 1 y 2.
Con estos conceptos como base estamos en disposición de empezar a plantear cómo calcular la huella de carbono en nuestra organización.
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